La especialización de algunos fabricantes ha hecho posible que hoy se pueden aplicar en construcción y arquitectura, fundamentalmente, formas y curvaturas impensables o imposibles de realizar hace tan sólo unos años.
La especialización de algunos fabricantes ha hecho posible que hoy se pueden aplicar en construcción y arquitectura, fundamentalmente, formas y curvaturas impensables o imposibles de realizar hace tan sólo unos años.
Si a esta especialización de los fabricantes unimos la tecnología desarrollada por los productores de los hornos de curvado para vidrio, tenemos como resultado no sólo una gran cantidad de formas y moldes posibles, sino además, una calidad de curvado muy elevada, que permite mantener las características ópticas y espectrofotométricas de los vidrios curvados que hoy se utilizan frecuentemente en arquitectura y construcción.
Hay que tener en cuenta, que además de sus aplicaciones en edificación, los vidrios curvados se utilizan en infinidad de muebles, mostradores de hostelería y restauración, mamparas de baño y ducha, lavabos, paneles separación, divisiones de estancias y vehículos industriales.
Tomando como base un vidrio monolítico recocido, el curvado del mismo se consigue con el empleo de un molde por gravedad en el curso de un ciclo térmico largo, alcanzando una temperatura de reblandecimiento próxima a los 600º C.
El vidrio curvado actualmente puede ser suministrado como vidrio monolítico, templado, laminado (con dos o más hojas), en unidades de doble acristalamiento, con vidrios de control solar, serigrafiados… y toda una larga lista de posibilidades.
Sin duda alguna, el desarrollo de la arquitectura en vidrio ha contribuido de manera notable a la utilización de los vidrios curvados en muchas aplicaciones exteriores e interiores, posibilitando a los arquitectos y proyectistas la creación de formas curvas y diseños complejos, que van desde el redondeo de esquinas a la construcción de fachadas con dobles curvaturas sobre distintos ejes.
Este tipo de vidrio representa un ejemplo claro de las exigencias que los creativos y proyectistas solicitan a la industria fabricante para que les suministre los productos necesarios para desarrollar y ejecutar sus proyectos de edificación.